- Órbita Newsletter
- Posts
- Un encuentro en Alaska
Un encuentro en Alaska
🪐 Se extiende la tregua comercial entre China y Estados Unidos; sobre el asesinato de un candidato presidencial de la oposición colombiana y el sportwashing en Europa.
Desde nuestra órbita, una mirada al mundo.
El 14 de agosto de 1790, el Tratado de Värälä cerró la guerra ruso-sueca sin mover fronteras, pero con una cláusula decisiva: Moscú renunciaba a inmiscuirse en la política interna de Estocolmo. Más de dos siglos después, Trump y Putin dialogarán en Alaska con piezas de negociación similares —alto al fuego, posibles cesiones territoriales o una neutralidad desmilitarizada para Ucrania— que podrían definir si cambia el mapa, cambian las reglas, o (por ahora) nada cambia. De esto hablaremos en el eje central de hoy.
Hoy, además, vamos a contarte:
Se extiende la tregua comercial entre China y EE.UU.;
Fallece (asesinado) un candidato presidencial colombiano de la oposición;
Ruanda y el sportwashing en Europa;
Y mucho más.
Vas a informarte sobre todo esto en menos de 10 minutos.
Escuchá el newsletter en menos de 5 minutos. Accedé al resumen de cada edición de nuestro newsletter directamente en Spotify.
EJE CENTRAL
Hacia un nuevo mapa europeo

En unos pocos segundos…
Reunión clave. Trump y Putin se verán en Alaska, con el expresidente estadounidense abierto a negociar cesiones territoriales de Ucrania, lo que marca un giro más crítico hacia Zelensky.
Soberanía en juego y precedentes peligrosos. Para Ucrania, ceder territorios sería una derrota estratégica y simbólica; para Rusia, un triunfo que consolidaría anexiones por la fuerza y debilitaría el principio internacional contra la adquisición de territorios mediante la guerra.
Un posible reacomodo del tablero global. El resultado podría redefinir la estrategia de EE.UU. frente a China, acelerar el rearme europeo y colocar a América Latina, incluida Argentina, ante dilemas diplomáticos si Washington respalda concesiones territoriales.
¿Qué pasó?
Este viernes, Donald Trump y Vladimir Putin se reunirán en Alaska por primera vez desde que comenzó la guerra en Ucrania. En la previa al encuentro, Trump sugirió que estaría dispuesto a negociar con Putin sobre el reparto de las partes de Ucrania tras el conflicto, y hasta comentó que “intentaría recuperar algo de territorio para Ucrania”. Sin embargo, Trump también criticó a Zelensky por negarse a ceder territorios según la constitución ucraniana, y llegó a sugerir que fue el presidente ucraniano quien eligió iniciar la guerra.
Funcionarios rusos presentaron a un enviado estadounidense una lista de demandas para un alto el fuego que incluiría el reconocimiento a la ocupación rusa de la región del Donbás, que ya está en gran parte bajo control de Rusia, así como de Crimea, un territorio que Moscú ocupó en 2014. Además podrían volver a la mesa de negociación la posibilidad de una Ucrania desmilitarizada, el compromiso que no se incorporará a la OTAN, y hasta un cambio político que saque a Zelensky del poder.
La elección de Alaska como sede para la reunión tiene un fuerte valor simbólico, ya que, aunque fue vendida a Estados Unidos en 1867 por U$S 7,2 millones, aún es vista por nacionalistas rusos como un antiguo territorio. Esta percepción refuerza los lazos históricos y la cercanía geográfica entre Rusia y Estados Unidos, y a la vez la creciente lejanía entre estos dos con Europa.
¿Por qué importa?
• Soberanía vs. Paz: Para Ucrania, ceder territorios como Donetsk y Luhansk equivaldría a una derrota, debilitando la noción de integridad territorial del Estado y amenazando su estabilidad política. Además, el liderazgo de Zelensky se construyó sobre la resistencia a la invasión y una política firme de no concesiones; retroceder ahora podría hacer que muchos consideren que años de guerra fueron en vano y lo responsabilicen por ello. Por otro lado, si Putin logra el reconocimiento internacional de la anexión mediante la fuerza, en clara violación del derecho internacional, se sentaría un peligroso precedente que podría alentar a otros líderes a seguir el mismo camino.
• ¿Qué significa una paz justa?: Putin y Zelensky parecen tener definiciones muy diferentes de lo que sería una "paz justa". Para Ucrania, cualquier acuerdo que implique la cesión de territorio sería injustificable, mientras que Rusia difícilmente se conforme sin ganancias territoriales y un compromiso de que Ucrania no se unirá a la OTAN. Más allá de lo que pase en Alaska, una paz positiva, estable y duradera a largo plazo parece difícil con posiciones todavía tan lejanas entre las dos partes en conflicto.
• Trump como emisario de la paz: Trump parece decidido a obtener el Premio Nobel de la Paz, casi a cualquier precio. Esta semana intermedió en el conflicto entre Armenia y Azerbaiyán; meses atrás, lo hizo entre India y Pakistán, e incluso entre Irán e Israel. Ahora apunta a Ucrania. Si en su primer mandato intentó posicionarse como mediador en Corea y Afganistán, en esta nueva etapa busca un protagonismo aún mayor en los principales conflictos globales.
¿Cómo impacta?
• A nivel global. Resolver tensiones en una región puede desplazar la presión hacia otras zonas, especialmente al Indo-Pacífico, donde China representa la máxima prioridad estratégica para Estados Unidos. Por su parte, el Kremlin, tras consolidar su influencia en Ucrania, podría dirigir su atención hacia otros países vecinos que aún no forman parte de la OTAN, como Georgia o Moldavia, o bien intensificar la presión sobre los Estados bálticos, cuya recuperación siempre ha sido una ambición imperial rusa.
• En Europa. La carrera por una Europa rearmada continúa con fuerza. En este contexto, la Unión Europea lanzó el plan ‘ReArm Europe’, con un presupuesto de EUR 800.000 millones para fortalecer su complejo militar, junto con la iniciativa Security Action for Europe, que contempla EUR 150.000 millones, y un Libro Blanco que propone avanzar hacia un mercado único de defensa. En mayo de 2025, Alemania oficializó un giro histórico en su política de defensa: el canciller Friedrich Merz anunció que buscarán elevar el gasto militar al 5 % del PIB. Además, hace dos meses, los 32 Estados miembros de la OTAN acordaron aumentar el gasto en defensa del 2 % al 5 % del PIB para 2035.
• En América Latina y en Argentina. Varios de los países latinoamericanos, inclusive Argentina, tomaron fuertes posturas en defensa de la integridad territorial ucraniana. Si Estados Unidos comienza a apoyar formalmente que Ucrania ceda territorio, encontrará a muchos países de la región en posiciones incómodas diplomáticamente. De hecho, Milei hablará con Zelensky por teléfono hoy, jueves, con el objetivo de dar respaldo a Ucrania y poner a disposición las vías necesarias para alcanzar la paz.
¿Cómo sigue?
• Escenario 1 - Acuerdo entre Trump y Putin impuesto a Zelensky. Rusia podría obtener parte del control en Donetsk, el reconocimiento de su ocupación de Crimea, y hasta potencialmente garantías que Ucrania no se unirá a la OTAN. Las concesiones serían vistas como una victoria simbólica de Putin. Ucrania, sin demasiado entusiasmo, podría aceptar a cambio de asegurarse el apoyo económico y financiero estadounidense, lograr la paz y mantener su independencia política.
• Escenario 2 - Status Quo. El conflicto podría continuar sin alto el fuego. Rusia mantendría la presión militar, mientras que Ucrania seguiría luchando por recuperar territorios. Este escenario prolongará la guerra, con altos costos humanos y materiales y pocas perspectivas diplomáticas.
• Escenario 3 - Paz Simbólica, sin repercusión real. Trump y Putin podrían anunciar un acuerdo, pero sin Ucrania en la mesa no se podrá implementar en el campo de batalla. La paz será solo en papel pero el conflicto continuará en el frente. Zelensky solicitaría ser incluido en una nueva cumbre.
Nuestra mirada en Órbita:
Hay tres motivos principales detrás de la búsqueda de paz de Trump en Ucrania. El primero es su interés personal por proyectarse como un "pacificador" y así aspirar al Premio Nobel de la Paz. El segundo, poner fin al apoyo económico y militar a Ucrania, una postura bien vista por su base MAGA de corte aislacionista. El tercero, mejorar las relaciones bilaterales con Rusia para alejarla de China, en una jugada que algunos analistas han denominado un “Kissinger invertido”.
Sin embargo, hay razones de peso para el escepticismo. En la historia reciente, sólo el 16 % de las guerras interestatales posteriores a la Segunda Guerra Mundial concluyeron con acuerdos de paz duraderos. El 21 % terminó con una victoria militar clara y el 30 % con altos al fuego sin acuerdos formales. Además, entre 1975 y 2018, más de un tercio de los acuerdos de paz colapsaron debido a la pérdida de apoyo interno, violaciones de los términos o cambios en la estrategia de los líderes políticos.
Para que un acuerdo de paz sea sostenible, es fundamental que ambas partes perciban bajas probabilidades de lograr una victoria militar. También deben existir presiones externas significativas, como incentivos positivos, garantías de seguridad ofrecidas por terceros y sanciones en caso de incumplimiento. Del mismo modo, el respaldo interno de sectores clave de cada país es crucial para sostener el compromiso.
Este marco tiene implicaciones claras para Ucrania. Sin garantías de seguridad concretas, persiste el riesgo de repetir lo ocurrido tras el Memorándum de Budapest de 1994, cuando Ucrania entregó su arsenal nuclear a cambio de garantías que jamás se cumplieron. A su vez, Rusia rechaza de plano una Ucrania integrada a la OTAN. Es un dilema circular: sin un ejército fuerte, Ucrania queda vulnerable a futuros ataques, pero Rusia no aceptará retirarse si no garantiza que Ucrania quede débil.
El resto del mundo se encuentra expectante al nuevo mapa que configure el desenlace del conflicto. Si Rusia obtiene finalmente la superficie ocupada, y el orden internacional legitima esa ganancia, el principio que prohíbe la adquisición de territorio a través del uso de la fuerza quedará pulverizado. Como resultado, otros actores internacionales –Israel, India, Turquía, Azerbaiyán, o Venezuela, entre muchos otros– podrían verse tentados a cristalizar sus aspiraciones jurisdiccionales a través de las armas, y no de la diplomacia.
VUELTA AL MUNDO

🇺🇸 🇨🇳 Trump extendió por 90 días el acuerdo tarifario con China. Ambas partes buscan evitar una escalada arancelaria que desemboque en una guerra comercial. En paralelo, China presiona a gigantes tecnológicos como Alibaba y ByteDance para reducir la compra de chips de Nvidia, priorizando productos nacionales. Su cuota de mercado en el país está bajando del 66% al 55% este año.
🇮🇱 🇵🇸 🇦🇺 En un ataque deliberado en Gaza, Israel mató a un corresponsal de la cadena Al Jazeera y a otros cinco periodistas. El ejército israelí acusó a los reporteros –de los pocos cronistas habilitados en Gaza– de tener vínculos con Hamás. En paralelo, Australia anunció que se sumará a Francia, Reino Unido, Canadá y Malta en el reconocimiento del Estado de Palestina en la ONU el próximo mes.
🇨🇳 El diplomático Liu Jianchao, considerado posible candidato a ministro de Relaciones Exteriores, está desaparecido desde finales de julio. Las autoridades chinas no han explicado su detención, que es la de mayor nivel desde la remoción del ex canciller Qin Gang en 2023. Reconocido por su positivo vínculo con Estados Unidos, su ausencia crea un vacío diplomático en medio de las crecientes tensiones por comercio y tecnología.
🇧🇾 El dictador bielorruso, Aleksandr Lukashenko, anunció que no se presentará a la reelección tras 31 años en el cargo. Países como Reino Unido, Australia, Canadá y Alemania venían exigiendo frenar la represión en el país. Intensificado desde agosto de 2020, Minsk ha llevado a cabo una campaña para silenciar a la sociedad civil, los medios independientes y cualquier forma de oposición política.
🇺🇸 Trump presentó un plan para reducir el crimen en Washington D.C., que incluye el despliegue de la Guardia Nacional en la ciudad y la toma el control de la policía local. El presidente afirmó que la ciudad enfrenta niveles de criminalidad inaceptables y prometió actuar con mano dura. Líderes locales y expertos cuestionaron la eficacia de las medidas y alertaron sobre posibles tensiones con la comunidad.
GRAVITANDO EN AMÉRICA LATINA

🇨🇴 El senador y precandidato presidencial Miguel Uribe Turbay falleció el lunes, luego de más de dos meses del atentado durante un mitin político en Bogotá. Figuras cercanas al oficialismo, como el exalcalde de Medellín, vinculan el homicidio con una posible conspiración, lo que ha generado críticas y creciente preocupación en varios sectores políticos.
🇧🇴 De cara a las elecciones en Bolivia del próximo domingo, las encuestas muestran un empate técnico entre dos candidatos de derecha, Samuel Doria Medina y Jorge “Tuto” Quiroga. En caso de que ningún aspirante supere el 50 % de los votos, o el 40 % con una ventaja de 10 puntos, se llevará a cabo por primera vez un balotaje presidencial, programado para el 19 de octubre.
🇵🇪 🇮🇩 Indonesia y Perú firmaron un acuerdo para aumentar el acceso al mercado de ambos países durante la visita de la presidenta peruana Dina Boluarte a Yakarta. Las negociaciones duraron catorce meses. El año pasado, Indonesia exportó bienes por U$S 331 millones a Perú, mientras que Perú envió productos por U$S 150 millones.
FUERA DE ÓRBITA
Geopolitica y ‘sportwashing’

La decisión del Bayern Múnich de terminar su vínculo comercial con Ruanda reavivó las críticas por el uso del fútbol como herramienta de ‘sportswashing’. El patrocinio, parte de la campaña turística “Visit Rwanda”, ya había generado cuestionamientos a otros clubes como Arsenal y Paris Saint-Germain por asociarse con un gobierno acusado de alimentar el conflicto en el este de la República Democrática del Congo. El enfrentamiento involucra a Ruanda y al gobierno congoleño, que también ha sido acusado de lavar su imagen a través del deporte. Kinshasa firmó recientemente un contrato de U$S 50 millones con el FC Barcelona, operación que críticos denuncian como un gasto injustificable en un país donde el 85 % de la población vive bajo la línea de pobreza. El caso no es aislado: Azerbaiyán pagó para lucir la marca “Land of Fire” en la camiseta del Atlético de Madrid, Qatar construyó su influencia con patrocinios a PSG y Barcelona, y Rusia usó a Gazprom y Aeroflot como embajadores en la Champions League y la Premier antes de la invasión a Ucrania.
GRÁFICO DEL DÍA
Con la inflación estable, Trump exige a la Fed recortar tasas

El índice de precios al consumidor (IPC) se mantuvo estable en Estados Unidos, igualando el registro interanual de 2.7 % de junio. Mientras tanto, Donald Trump continúa presionando al presidente de la FED para que recorte la tasa de interés. Trump amenazó con denunciar a Powell por su “horrible e incompetente trabajo” al mando de la Reserva Federal de Estados Unidos.
PROGRAMA DE REFERIDOS
¿Hay algo que te gustaría comentar o debatir?
Escribinos a [email protected]
¿Alguien te reenvió este correo?
Empezá a recibirlo vos también
Hasta la próxima vuelta 🪐